sábado, marzo 28, 2009

DIARIO DE UN ANTIMENFOTISTA 87 - Claremont en Unicomic

BEST.
UNICOMIC.
EVER.
!!!!!!!!!!!!!!!!!

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Publicado en “La Verdad” de Viernes 27 marzo 2009

CLAREMONT EN UNICOMIC

Imaginen la historia de un adolescente que crece en Alicante leyendo tebeos. Un chaval que desarrolla su afición, pasando de leer Mortadelos a otras obras de contenido más complejo, como los cómics de superhéroes. Un buen día, cae en sus mano el número uno de la edición española de un nuevo cómic de la editorial Marvel, titulado Excalibur. El chaval se engancha irremediablemente, con tanto entusiasmo que hace extensiva su nueva afición a sus amigos más allegados. Ese cómic estaba escrito por un señor americano de origen británico llamado Chris Claremont.

Nuestro protagonista pronto se entera que Excalibur es en realidad una colección derivada de otra más grande y famosa: Los X-men, más conocidos en España como La Patrulla-X. Es un mundo nuevo y desconocido. A fin de cuentas, a pesar de que la editorial Marvel es la creadora de iconos del cómic como Spiderman, Iron Man o Los Vengadores, la Patrulla-X no eran en aquella época, finales de los 80, los personajes más conocidos por el público en general (papá y su primor mayor sabían quienes eran los Cuatro Fantásticos o el increíble Hulk, pero no habían oído hablar de Lobezno, Kitty Pryde o Cíclope). Por tanto aquel era un universo nuevo, tejido con multitud de historias de Chris Claremont, que él, su hermano y sus amigos iban descubriendo. ¿Qué tenían aquellas historias para cautivarle tantísimo? Aquellos superhéroes, a diferencia de otros, eran los marginados, temidos y odiados por la humanidad a la que protegían por haber nacido diferentes. Eran mutantes, nacidos por alteración genética de su ADN, la cual les había dado sus poderes de superhéroes. Claremont convertía el drama de los X-men en una parábola evidente sobre racismo, homofobia o cualquier otro tipo de discriminación. Para un adolescente en la rebeldía típica de la época, poco propenso a seguir los gustos musicales y de aficiones de la corriente principal era fácil sentirse identificado con aquellos X-men (a fin de cuentas, nuestras aficiones minoritarias, como el cómic, nos marginaban de alguna manera en los tiempos del instituto). Había algo más: aquellos personajes femeninos de carácter fuerte, nada que ver con el estereotipo de “damisela en apuros” o “compañera del héroe” que salpicaba a las féminas en el cómic y, en realidad en cualquier otro medio creativo. Para un chaval educado en valores de igualdad por sus padres y en los propios del feminismo por sus tías ver a Tormenta liderando a la Patrulla-X (incluso cuando perdió sus poderes) o la independencia y determinación mostradas por Pícara o Jean Grey era fácil la comunión con aquellos valores, además de disfrutar de las aventuras y la acción, por supuesto. Luego llegarían más historias de Chris Claremont: Los Nuevos Mutantes, Inferno, una novela gráfica sobre Star Trek, la segunda serie de los x-men… un buen día, Claremont dejaba la Patrulla-X y aquello no volvió a ser lo mismo. Años después, regresaría triunfalmente.

Aquella afición a Claremont y los X-men supuso un punto importante en la vida de nuestro protagonista: conoció a otros aficionados entre las estanterías de Ateneo, una pequeña tienda de tebeos abierta entonces en el Plá, desarrolló otros hobbies afines (como los juegos de Rol y la ciencia-ficción), lo cual le llevó a organizar en su instituto algunas jornadas sobre las mismas. Una vez llegó a la Universidad, e involucrado en el Consejo de Alumnos de la misma, se le ocurrió la idea junto a un puñado de aquellos amigos a los que conoció en primera instancia gracias a las aficiones compartidas, organizar unas jornadas de cómic en Alicante, desde la universidad, para intentar dignificar un arte salpicada de prejuicios en España, donde seguía primando la concepción de que los tebeos eran solo para niños.

Once años después, nuestro hombre le debe mucho a aquellas jornadas. Ellas y otros eventos organizados por amor al arte y por dar rienda suelta a sus inquietudes cultureles, propiciaron una carrera profesional como organizador de eventos y productor de conciertos. Hoy trabaja en lo que le gusta gracias a sus aficiones y, echando la vista atrás, gracias, de alguna manera, a las historias de Chris Claremont. De repente, y cuando estaban él y sus amigos involucrados en la organización un año más, de sus queridas jornadas, surge la oportunidad de traer a Chris Claremont a Alicante, a su ciudad.

Unicomic 2009 comenzó ayer Jueves en la Universidad de Alicante. Hoy Viernes a las 18’00 h. en el Aula de Cultura de la CAM Chris Claremont mantendrá un encuentro con el público asistente. Nuestro hombre, el que creció con las historias de Claremont y los X-men estará en la mesa, ayudando a presentarle y a ejercer como su traductor, intentando contener la emoción y pudiendo agradecer de primera mano al maestro tantas horas de lectura, diversión y reflexión. Dentro de él, el niño que creció leyendo tebeos, sonreirá feliz. Antimenfotistas del mundo, uníos.

DANIEL SIMON

www.danielsimon.blogspot.com

www.unicomic.es

P.D: Otros actos de Unicomic incluyen una mesa redonda con dibujantes de la revista El Jueves y un encuentro con el dibujante inglés Dough Braithwhite, que ha dibujado a personajes como Superman, Batman o el Capitán America. Todos estos, el sábado por la tarde en la sede de la Universidad ¡Feliz Unicomic 2009!


2 comentarios:

mamaglamur dijo...

Yo tambien me he emocionado ante el MAESTRO DE MAESTROS ( PARA MI)!Me ha faltado regalarle un mortadelo! Ha sido todo un honor! A mi me ha firmado el excalibur nº17 (MI primero) y se ha entretenido en hojear el comic COMPLETAMENTE! La verdad es q tambien es casualidad q despues de tantos años siga queriendo tantisimo a ambos! Chris & Alan forever! Y Pacheco,Arthur,etc...

danilefreak dijo...

ahi, ahi, arthur adams también forever!!!

gracias a tí!

DANI